Apenas cuatro días después de haber emitido un informe sobre el ex secretario de Transporte de la Nación, Ricardo Jaime, el programa «El Avispero», que se emitía por Canal 10 de Córdoba, fue levantado del aire

(Corresponsal en la ciudad de Córdoba. Clarín, jueves 8 de agosto de 2013)- La emisora cordobesa depende de los Servicios de Radio y TV (SRT) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) cuyo rector es Francisco Tamarit, ex esposo de Carolina Scotto, la ex rectora de la UNC y candidata a diputada nacional por el kirchnerismo cordobés.

“El rumor ya se había instalado unos días antes –contó el periodista Lázaro Llorens, uno de los panelistas de El Avispero –, porque hicimos un informe sobre la ley de medios y le preguntamos al delegado cordobés de la AFSCA, Carlos Vicente, por algunas cuestiones con las que no acordábamos e hizo agua”.

Ese programa fue el 13 de julio. Una semana después, el sábado 20 de julio, pusimos al aire el informe de Jaime y nos levantaron sin más ”, añadió.

El periodista cordobés responsabilizó al propio rector Tamarit y al secretario de Derechos Humanos de la Nación, el cordobés Martín Fresneda, del levantamiento del programa: “El productor Jorge Zapata me avisa el 24 de julio que nos levantaron y le pregunté por orden de quién. Y me dijo que la notificación se la había hecho el presidente de los SRT, Esteban Falcón. Cuando indago más, me entero de que Tamarit había ordenado que no saliera más al aire El Avispero. Pero en el medio aparece un mensaje de texto de Fresneda cuestionando nuestro informe de Jaime”.

El periodista cordobés agrega que “dentro de los SRT me confirman que Fresneda y Tamarit fueron quienes ordenan el levantamiento del programa. Le pregunto a Fresneda por el mensaje de texto contrario a nuestro informe y me admite que existió y se cubrió diciendo que lo hizo como una crítica personal”.

El Avispero se emitía los sábados a la noche y llegó a medir siete puntos, lo que lo convirtió en uno de los programas más vistos del canal universitario.

“Nunca escrachamos a nadie, siempre que hacíamos un informe, invitábamos al piso a esa persona para defenderse. Nunca nos querellaron. La explicación formal que recibí fue un comunicado en el que dicen que el levantamiento fue por razones comerciales y de programación. Es un acto de censura lamentable”, denunció Llorens.